Alerta en Veracruz por consumo de droga zombie y fentanilo entre jóvenes

Médicos del sector privado en Veracruz alertaron sobre un incremento de casos de intoxicación .

Médicos del sector privado en Veracruz alertaron sobre un incremento de casos de intoxicación por fentanilo y xilacina entre adolescentes, pese a la ausencia de registros oficiales por parte de la Secretaría de Salud estatal.

La xilacina, un sedante veterinario no aprobado para uso humano y conocido popularmente como “droga zombie”, ha sido identificada en combinación con fentanilo en pacientes atendidos recientemente, según confirmó en entrevista radiofónica el psiquiatra Arturo Morlet Barjau, con práctica en el puerto de Veracruz.

Ya están circulando ambas sustancias. En los últimos meses se ha atendido varios casos, todos menores de edad o adultos jóvenes, declaró Morlet en entrevista.

«¿Dónde lo consiguen? No puedo preguntarlo por razones éticas, pero lo consiguen con frecuencia y ya está siendo en Veracruz Puerto, he internado un par de pacientes que están consumiendo no solo el fentanilo sino esa combinación de fentanilo con xilacina».

Agregó que los pacientes llegan con síntomas de sedación extrema, desorientación y, en algunos casos, pérdida de movilidad.

Aunque no hay cifras públicas disponibles, especialistas en adicciones del estado reportan que los casos van en aumento y que la mayoría de los afectados provienen de entornos familiares sin supervisión constante.

La Secretaría de Salud de Veracruz no ha emitido comunicados sobre la presencia de xilacina en el estado ni sobre medidas para su detección o atención médica.

En Estados Unidos, la mezcla de fentanilo con xilacina fue declarada una amenaza emergente de salud pública en 2023.

Autoridades sanitarias han advertido que la combinación dificulta la reversión de sobredosis, ya que la xilacina no responde a la naloxona, el antídoto habitual para opioides.

México ha sido identificado como país de tránsito para el fentanilo, pero los especialistas advierten que el consumo interno está creciendo, especialmente en zonas urbanas fuera del norte del país.

Morlet advirtió que, sin intervención institucional, podrían producirse las primeras muertes en el estado de Veracruz. El peligro ya está aquí. Se necesitan campañas de prevención, protocolos clínicos y vigilancia efectiva, dijo.