En Catemaco se celebrará el próximo 2 de noviembre, por tercer año consecutivo, la elaboración del pan de muerto más grande de Veracruz, una iniciativa que reúne a la comunidad en el marco de las festividades del Día de Muertos.
El evento se llevará a cabo en el atrio del Santuario de Nuestra Señora del Carmen, también conocido como Iglesia de la Virgen del Carmen, ubicado en el corazón de la ciudad en la región de Los Tuxtlas.
La actividad fue impulsada por el activista socioambiental Juan Carlos Atzin Calderón, ganador de premios estatales y nacionales, quien, entrevistado en las instalaciones del periódico El Dictamen, donde fue recibido por el gerente de publicidad, Giorgio Villarello Ahued, resaltó que ha convocado a panaderías locales y a la parroquia San Juan Bautista para fortalecer esta tradición.
Buscan impulsar las tradiciones y costumbres
Este año queremos continuar con esta actividad que busca impulsar las tradiciones y las costumbres (…) Lo característico de este pan es que normalmente conocemos los panes tradicionales de muerto; sin embargo, para realizar el pan de muerto más grande de los Tuxtlas se genera la fabricación de la cabeza, el cuerpo, los brazos y las piernas. Cada uno de los panaderos va a generar una parte del cuerpo, y el 2 de noviembre, a partir de las 10:30, se arma y se presenta a todos los ciudadanos que nos visitan.
Destacó que el año pasado los visitaron personas de la zona conurbada y de las altas montañas, por lo que este año se decidió difundirlo aún más para que llegue a más personas, no solo del estado, sino también del país.
“Hoy participan comercios locales, pero también participan locales que, con los insumos, nos ayudan”.
Resaltó que este año se presentará por primera vez un son alusivo a las fechas y al evento llamado “el son del muertito”.
“Es un son jarocho que realizó un grupo local de soneros y vamos a presentarlo como una forma de generar tradición en torno a hacer frente a costumbres o tradiciones de otras partes del mundo”.
Estiman al menos 3 mil visitantes en Catemaco
El organizador del evento recordó que en la primera división se realizaron 7 metros de pan y recibieron a aproximadamente 600 personas. Durante la segunda edición se recibieron mil personas y esperan que en esta tercera edición los visiten alrededor de 3 mil personas, ya que las fechas coinciden con el fin de semana.
En la última edición, el pan alcanzó una longitud de 8 metros con 10 centímetros, cifra que se espera superar este año con la participación de las panaderías “Pan Artesanal Don Toño”, “Bocaditos”, “Panadería El Trigo de Oro” y “Panadería La Providencia”.
Juan Antonio Utrera Pérez, propietario de la panadería artesanal Don Toño, explicó que se utilizarán más de 200 kg de harina, más dos cajas de huevos y entre 30 y 40 kilos de mantequilla, teniendo también variedad de sabores porque cada panadería tendrá su especialidad con el pan de anís, naranja, mantequilla y el natural.
Mencionó que al momento de armar el pan se hace por partes hasta juntarlo todo.

“Todo se arma por partes: brazo, cabeza; todo se arma por partes y participan arriba de 25 panaderos de las cuatro panaderías, y se demoran dos días en hacerlo”.
Alistan los preparativos para el pan de muerto más grande de Veracruz
En cuanto a la decoración del lugar donde será colocado el pan, esta correrá a cargo de los floricultores que siembran cultivos en la zona de Los Tuxtlas.
José Luis Lara Cruz, representante de los floricultores que siembran cultivos en la zona de Los Tuxtlas, indicó que se decorarán dos arcos con flores de cempasúchil y de igual manera llevarán canastas, abanicos, ollas y todos los adornos tradicionales.
“Probablemente se utilizarán 50 rollos para vestir los arcos y el lugar donde se colocará el pan”.
Para finalizar, Manuel Antonio Atzalon, cronista del pueblo mejor conocido como “Meme Yo”, recordó que esta tradición inicia desde 1935, cuando el panteón fue reubicado y, debido a la lejanía, las personas decidieron quedarse a dormir en el panteón para recibir a sus familiares que han partido al otro mundo.
Actualmente, dijo, ya es “jolgorio”, ya que hay venta de platillos típicos y, desde hace tres años, se sumó la tradición de repartir el pan de muerto en el atrio de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen para ser bendecido y repartido entre los asistentes.


