La Policía ha detenido a un sospechoso, y ha encontrado un rifle AK-47, con mira telescópica, entre los arbustos junto a la verja del recinto
El FBI investiga lo que considera un aparente “intento de asesinato” contra el expresidente de Estados Unidos Donald Trump, el segundo en solo dos meses. El incidente se ha producido en el club de golf propiedad del candidato republicano en West Palm Beach, en Florida, cuando agentes del Servicio Secreto vieron asomar el cañón de un rifle AK-47 oculto entre los arbustos de la verja. Uno de los agentes abrió fuego y un hombre se dio a la fuga. El candidato se encuentra a salvo. Un sospechoso ha sido detenido. La Policía ha localizado el arma de fuego y dos mochilas escondidas entre los arbustos que rodean el recinto.
El propio Trump ha confirmado que se encuentra “sano y salvo” en un mensaje de texto enviado a sus simpatizantes. “De Trump: ¡Estoy SANO Y SALVO! Nadie ha resultado herido. Gracias a Dios. Agradezco tener vuestro apoyo”, indica el mensaje. “Hay gente en este mundo que hará lo que haga falta para detenernos”, agrega, “yo no dejaré de luchar por ustedes. ¡No me rendiré nunca! Siempre les querré por apoyarme. ¡Mediante nuestra UNIDAD Haremos a Estados Unidos Grande De Nuevo!”
El incidente introduce un nuevo factor en la accidentada campaña electoral estadounidense, a apenas 50 días para unos comicios presidenciales que prometen unos resultados muy ajustados entre Trump y su rival demócrata, Kamala Harris. Las encuestas arrojan un empate técnico entre ambos.
Las primeras informaciones de lo ocurrido han llegado desde la campaña del candidato presidencial republicano, para alertar de que Trump se encontraba “a salvo después de varios disparos” próximos a él.
En el momento del incidente, Trump se encontraba jugando al golf en un día de descanso alejado de la campaña electoral. En esos momentos se desplazaba entre dos hoyos, el 5 y el 6. Uno de los agentes que forma parte de su escolta del Servicio Secreto vio sobresalir el cañón del rifle entre los arbustos que rodean el campo. El sospechoso se encontraba varios hoyos por delante del empresario. Entonces, el agente disparó varias veces, según ha informado el FBI. Eso hizo que el sospechoso se diera a la fuga. Hasta el momento no se ha esclarecido si el presunto atacante llegó a abrir fuego en algún momento.
El sheriff del Condado de Palm Beach Rick Bradshaw ha explicado en una rueda de prensa que la primera llamada de alerta se recibió en torno a las 13.30 con el aviso de que se había producido un tiroteo. El área quedó inmediatamente acordonada.
“Afortunadamente, un testigo presencial vio a una persona darse a la fuga en un vehículo deportivo utilitario Nissan negro. Realizó una fotografía del vehículo en la que se veía la matrícula. Eso fue de gran ayuda”, ha explicado Bradshaw, en una rueda de prensa conjunta con responsables del FBI.
Eso permitió a los agentes localizar con rapidez el vehículo sospechoso, interceptarlo y detener a su ocupante en el condado de Martin, aproximadamente a una hora de distancia al norte del club de golf. Posteriormente, en los arbustos, se encontró el rifle, al que se había instalado una mira telescópica, además de una cámara Go-Pro “con la que pretendía grabar la escena”, según el sheriff, y dos mochilas. La mira, ha precisado el FBI, hubiera permitido al atacante disparar con facilidad contra Trump, que se encontraba a más de 300 metros de distancia.
La policía conoce la identidad del detenido, un varón, aunque no ha querido divulgarla hasta el momento. Entre los detalles que ha dado a conocer ha precisado que, cuando fue arrestado, el sospechoso estaba desarmado y se ha mostrado tranquilo. Los disparos se originaron en el exterior de la valla que rodea el campo de golf, según han explicado dos fuentes a la agencia Reuters