La clínica Bellum, en la cual una paciente sufrió un ataque de convulsiones derivado de un procedimiento clínica estético riesgoso, ya había sido clausurada con anterioridad. No obstante, los responsables de esta cambiaron su domicilio para tratar de despistar a las autoridades, así lo dio a conocer la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado (COEPRIS).

La dependencia se encuentra en una revisión constante a todos los inmuebles en los que se llevan a cabo este tipo de procedimientos. La vigilancia se realiza por medio de inspectores que determinan si se cumple la normativa sanitaria y si las actividades que se realizan ahí cuentan con los permisos adecuados, aseguró el comisionado estatal de la Coepris, Mario Rebolledo Urcádiz.

El funcionario explicó que la clínica Bellum, la cual fue clausurada recientemente y que está bajo una investigación de la Fiscalía General de Justicia del Estado, ya había sido visitada por los inspectores de la dependencia de la Secretaría de Salud y se había procedido a su clausura.

¿Por qué cancelaron la clínica Bellum en Tamaulipas?

Pese a que tenía prohibido realizar cualquier tipo de actividades, el responsable de este centro volvió a abrirlo en otro domicilio. Fue gracias a una denuncia que se pudo alertar a la Fiscalía General de Justicia para que volviera a suspender las operaciones estéticas que se realizaban en el inmueble, ya que no contaba con licencias de operación y no se tenían los requisitos mínimos para brindar atención sanitaria en el sitio.

Urcádiz advirtió que la Coepris realiza acciones de vigilancia en todo el estado principalmente en la franja fronteriza, pues es alto el número de establecimientos denominados como clínica de estética en este punto. Hasta el momento, la Coepris ha clausurado cuatro de estos establecimientos por no cumplir con la norma, tres ubicadas en la frontera y una en el municipio de Ciudad Madero.

¿Cuántas clínicas vigila la Coepris en Tamaulipas?

En Tamaulipas, citó, existen 213 hospitales, de los cuales 48 son públicos y el resto 165 son clínicas y hospitales privados, hacia los cuales se dirige un programa calendarizado de vigilancia y supervisión para que cumplan con la normatividad sanitaria.

Igualmente hizo el exhorto a la comunidad en general para que cuando acuda a cualquier establecimiento comercial de este tipo donde se realizarán una intervención médica procure evaluar si el sitio es idóneo y si el responsable cuenta con las debidas credenciales sanitarias que emite la propia autoridad en la materia.