De acuerdo con sus declaraciones, Ana Christian “F” ultimó a sus hijos para que no sufrieran con la sociedad actual.
Ana Christian “F” imputada por el homicidio de sus dos hijos en un hotel de Morelia en el mes de junio, fue vinculada a proceso, pues de acuerdo a los datos de prueba la madre de familia actuó con dolo y motivada por su deseo de no dejar a los menores en este mundo hipócrita.
Durante la exposición de motivos, la defensa de los abuelos paternos, considerados como víctimas indirectas, detalló que el pasado 13 de junio, Ana Christian arribó, en compañía de su hijo J. A. F., de 12 y su hija D. A. F., de 10 años de edad, al Hotel Torreblanca, donde pagó en efectivo 2 mil 500 pesos para hospedarse hasta el día 17 de junio, para lo cual le fue asignada la habitación número 133.
Las investigaciones hechas por la Fiscalía General del Estado, apuntan a que durante su primer día de estancia, la madre y los menores compraron comida y convivieron en la alberca del hotel; posteriormente, en esa misma fecha, la mujer habría cometido el crimen.
“Tomó la determinación de privarlos de la vida, tuvo todo el tiempo para planearlo. Estaba consciente de lo que estaba realizando en todo momento”, señaló el fiscal asignado al caso que conmovió a la sociedad michoacana.
Ana Christian reveló a su familia que había cometido el crimen contra sus hijos porque “no los quería dejar en este mundo hipócrita”. El agente del Ministerio Público señaló que en ningún momento, la mujer realizó algún acto para evitar la muerte de sus hijos.
Tras esta exposición, tocó el turno a la defensa de Ana Christian, sin embargo, no hubo ninguna manifestación a su favor. La imputada se reservó su derecho de hablar al igual que las víctimas indirectas.
Habría tenido una relación extramarital
El juez continuó con la exposición de elementos, en la que detalló que tras abandonar el Hotel Torreblanca, Ana Christian abordó un taxi en el que acudió a varias farmacias a comprar medicamentos y finalmente, pidió ser llevada a un hotel.
La mujer fue trasladada al Hotel Pie de la Sierra, donde horas después fue localizada con heridas y bajo los efectos de medicamentos controlados, por lo que fue trasladada a un hospital en calidad de detenida.
El juez detalló que las necropsias practicadas a las víctimas, determinaron como causa de muerte la asfixia mecánica, aunque ninguno de los menores presentó huellas de lucha o forcejeo.
Pese a que inicialmente Ana Christian dijo a su familia que sus hijos accidentalmente habían bebido refresco con clonazepam, los exámenes toxicológicos no arrojaron sustancias como alcohol, barbitúricos, anfetaminas, opiáceos, psicotrópicos, cocaína marihuana, ni ninguna otra sustancia en los cuerpos de las víctimas.
Finalmente, el juez determinó la vinculación a proceso al considerar que los datos de prueba permiten “inferir fundadamente que la persona que privó de la vida a los menores fue Ana Cristian; no hay otra opción, no hay otra posibilidad”.
Durante la audiencia, el enjuiciador expuso detalles sobre la vida de Ana Christian, quien luego de quedar viuda se estableció en la casa de sus suegros, quienes aparentemente días antes del crimen la corrieron de su vivienda, por presuntamente sostener una relación con un compadre.