El sector transportista exige a las autoridades una estrategia por los robos y delincuencia en las carreteras del estado.
Transportistas de carga de la zona centro del estado de Veracruz, alzan nuevamente la voz ante la alarmante inseguridad que enfrentan diariamente en las carreteras, especialmente en la zona limítrofe de la entidad jarocha con el Estado de Puebla.
El consejero de la asociación regional, Enrique Rustrián Villanueva, denunció que los robos a unidades de carga continúan siendo una constante, con una frecuencia de entre 3 a 5 asaltos diarios registrados solo entre los miembros de su agrupación.
“El tema es muy preocupante, el tema de los robos nunca ha parado. Hay temporadas donde se incrementa la vigilancia y se calma, pero vuelve a resurgir. Es un ciclo constante que llevamos denunciando desde hace muchos años”, explicó.
El representante de los transportistas subrayó que la situación es particularmente grave en el tramo que va de las Cumbres de Maltrata hacia Esperanza, un punto rojo históricamente peligroso donde la delincuencia organizada opera con toda impunidad e incluso queda en duda la complicidad de las autoridades carreteras, como lo es la Guardia Nacional.
“Desde 2019 he dicho lo mismo en medios, y lamentablemente en cinco años no ha cambiado nada. Necesitamos mano dura”, enfatizó.
El consejero de la CANACAR, dijo que, además del temor constante, los robos generan pérdidas millonarias para los transportistas, ya que una sola unidad robada, considerando camión, remolques y equipo adicional, puede representar una pérdida de entre 5 y 6 millones de pesos, sin contar los costos posteriores como grúas, trámites ante el Ministerio Público, y deducibles de seguros.
“No solo es el dinero, hemos tenido operadores baleados, otros fallecidos, y unidades que nunca se recuperan. La pérdida de una vida humana no tiene precio”.
Así mismo señaló que las estadísticas oficiales sobre el número real de robos deberían ser dadas a conocer por el Gobierno Federal, ya que son ellos quienes concentran las denuncias y carpetas de investigación.
También criticó que, pese a esfuerzos esporádicos como el uso de drones o aumento temporal de patrullajes, la delincuencia se reorganiza rápidamente y continúa operando en las Cumbres de Maltrata, en la zona limítrofe entre Veracruz y Puebla.
“Es como un hormiguero: puedes matar a las hormigas, pero si no destruyes el nido, el problema sigue. Hoy no hay investigaciones que lleguen al fondo, no se desarman las bandas”, afirmó.
El empresario transportista afirmó que, a pesar de que muchas empresas invierten en sistemas GPS, protocolos de monitoreo y convoyes para aminorar riesgos, esto no garantiza la seguridad.
“La delincuencia está mejor equipada que nosotros. Tienen radiocomunicaciones, tractores para remolcar, y conocen perfectamente los movimientos en la zona”, alertó.
Enfatizó que el llamado es claro: el sector transportista exige al Gobierno Federal y Estatal, una estrategia de seguridad efectiva, mano dura contra las bandas criminales y mayor comunicación con las asociaciones de transportistas.
“Hoy cualquier ciudadano que va de Córdoba a Puebla lo piensa dos veces. Muchos prefieren viajar en avión por miedo. El gobierno debe garantizar la seguridad de todos, pero no lo está haciendo. Exigimos que reaccionen, que actúen. Ya basta”, concluyó.


